Dame una señal
o una luz
por más tenue que sea
para que yo pueda creer
para que reciba tu palabra
como un golpe de puño
aquí en el pecho
el nido tibio y oscuro
donde crece el ave milagrosa
un tumor que estalla
bajo mis huesos
dibujando una herida
esa deliciosa boca roja
puro
deseo.
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